¿Cómo podemos gestionar las emociones de nuestro hijo?
¿Cómo sobrellevar el divorcio con nuestro hijo?
Una de las preocupaciones de los padres al separarse y al terminar su relación, es cómo le afectará está situación a su hijo/a. Para saber gestionar mejor un divorcio ante nuestro hijo, debemos entender qué significa para el pequeño que sus padres se separen. Debemos preguntarnos: ¿Qué significa el divorcio para un niño?
- Peligro: el niño puede llegar a pensar que la estabilidad que había se perderá, y se puede preguntar quién lo cuidará y quién lo querrá. Puede generar cierta incertidumbre que le hará preocuparse por lo que puede llegar a pasar.
- Una pérdida: las cosas van a cambiar y es probable que a partir de ahora pase menos tiempo con su padre o con su madre de lo que hacía ahora, ya que ahora van a estar separados.
- Un reajuste: La dinámica en el hogar va a cambiar, ahora tanto su padre como su madre ejercerán los mismos roles cuando estén con el pequeño.
- Un misterio: En ciertas edades los hijos pueden llegar a sentirse culpables. Necesitan que sus padres les cuenten que ha pasado, necesitan comprender lo sucedido.
Una vez aclarado que puede significar para un niño un divorcio, debemos saber que no hay reglas fijas que nos digan como les afectará a los niños este tipo de separación familiar, pero si hay 3 factores que pueden influir en cómo les afectará: el tipo de divorcio, la personalidad y la edad. La clave está en cómo gestionamos los adultos la separación frente a nuestro hijo. Lo ideal es sobrellevar una ruptura civilizada, abordada desde el respeto, en la que aún no poder funcionar como pareja, se pueda actuar como un equipo en la crianza de los hijos. Si el divorcio es manejado de forma inadecuada por parte de los padres, podría resultar en algo traumático y doloroso para el niño.
Lo importante es nunca olvidar lo que es mejor para nuestro hijo y su educación. Al fin y al cabo, los niños necesitarán su espacio para expresarse y para interiorizar la situación, pero los niños necesitarán siempre que sus padres sigan siendo padres. Debemos tener cuidado y ser siempre padres comprensivos, no permisivos.
¿Cómo puede expresarse mi hijo/a?
Debemos estar atentos y saber cómo y cuándo pueden surgir las reacciones al divorcio y los posibles comportamientos que nuestros hijos pueden experimentar al vivir un divorcio, para así poderlos ayudar. La clave siempre está en escuchar lo que el niño nos dice, y observar los cambios en su comportamiento. Antes, durante y después de la separación el niño puede mostrarse:
- Triste o apático: es inusual que muestren su tristeza con el llanto. Los niños suelen estar irritables y/o agresivos cuando intentan mostrar su tristeza.
- Muy rabioso: puede estar enfadado en todo momento, y sin tener claro el por qué ni con quién, o enfadarse con alguno de los padres y rechazarlo.
- Inseguro: puede volver a manifestar conductas superadas anteriormente. Volver a atrás y parecer un niño pequeño otra vez.
- Diferente a lo usual: puede ser que en casa se comporte como siempre pero manifieste su tristeza o su enfado en el colegio, portándose mal.
Lo importante es tener claro que estos sentimientos/comportamientos son fases del proceso que los niños pueden experimentar al sobrepasar el duelo por el divorcio y al saber encontrar otra vez esa estabilidad familiar que se ha visto afectada. Con la ayuda de los padres y de gente cercana al pequeño, este se integrará a la nueva dinámica y encontrará el equilibrio que le haga ser feliz.